
Por: Andrea Pérez Espinoza *
Carlos Marx, hace muchos años ya nos habíamos presentado en qué consistiría la expansión del capitalismo y del mercado mundial desde un análisis materialista, algunos teóricos liberales le han llamado globalización y es el término que normalmente las personas asocian a la interconectividad mediante las tecnologías de la información y comunicación, y el comercio.
Para el marxismo esta forma de expansión del modo de producción capitalista, no es más que una muestra de la necesidad de subsistencia del mismo, pero ¿Por qué el capitalismo influye en la narrativa de los medios de comunicación?, parte de dicha fase imperialista también tiene por objetivo la dominación ideológica de las masas, que permite mantener intacta la superestructura de dicho modo de producción.
De tal manera que los medios de comunicación y la tecnología se han convertido en mecanismos de las clases dominantes, para implantar sus sistemas de ideas, valores, creencias y legitimar ante el ojo público su accionar para defender sus intereses de clase.
En la sociedad actual ya no solo hay que preocuparse por la religión como medio de dominación, sino que la guerra cultural se ha amplificado y el neoliberalismo mediante el hedonismo y el consumismo, ha buscado otros métodos para dividir a la clase trabajadora y redirigirla a las luchas individualistas, como es el caso del feminismo y la diversidad, haciendo que todo aquel que cuestione la desigualdad social y económica desde la colectividad, sea visto como un egoísta e ¨inadaptado social¨.
Desde el uso de la psicología social y el marketing político a través de las TIC´S, hasta cierto punto se ha logrado ir borrando entre generaciones la memoria histórica de las luchas sociales y en el peor de los casos se ha desdibujado la realidad histórica y se reescrito al antojo de la clase dominante.
Todo esto acompañado de la monopolización de los medios de comunicación y las empresas de tecnología, que a su vez buscan y moldean perfiles de periodistas, influencers, locutores, escritores, abogados, políticos , economistas y otro sinnúmero de profesionistas, que niegan estar realizando un trabajo político y lo disfrazan de opiniones neutrales e independientes.
Un claro ejemplo de estos individuos son los corresponsales pertenecientes a la Asociación de Corresponsales de la Casa Blanca fundada en 1914, quienes son abanderados de la ¨imparcialidad y se consideran independientes a los interés de la Casa Blanca, en dicha Asociación participan periodistas pertenecientes a las líneas políticas Republicanas o Demócratas, de medios como el Washington Post, Los Ángeles Times, CBS NEWS, USA today , Reuters, etc.
La Oficina de Servicios Estratégicos, más conocida por su nombre original en inglés, Office of Strategic Services u OSS, antecesora de la CIA durante la segunda Guerra Mundial también realizo campañas comunicacionales en contra de sus adversarios, con anterioridad los norteamericanos realizaban dichas operaciones pero de manera desorganizada y mediante diversos departamentos.
En el caso de América Latina, Estados Unidos empezó a penetrar e instaurar de todas las maneras posibles, los Gobiernos y medios de comunicación, cabe destacar que dicho trabajo siempre ha sido acompañado por la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos, por sus siglas en inglés (CIA).
Desde su Fundación en 1947, por el Presidente Estadounidense Harry S. Truman, se manifestó en innumerables ocasiones que el papel de la comunicación tendría por objetivo exportar y difundir las innovaciones procedentes del país norteamericano, a dicho modelo se le llamo modelo de desarrollo modernizador.
Con los posteriores avances tecnológicos, se han creados más medios como: canales de televisión, la radio, periódicos físicos, digitales y redes sociales, y está más que demostrado que el capitalismo en su fase imperialista ha monopolizado los medios de comunicación y estos tienen claros vínculos políticos, pues existe una economía política de la comunicación, que reduce la pluralidad de enfoques y ha generado como consecuencia la ‘desideologización’ aparente del relato social, conviertiendo los conflictos sociales en conflictos individuales,
Esta reducción de la pluralidad de enfoques ha llevado a la persecución de medios de comunicación, que no estan al servicio de los interese imperialistas y que responden a un periodismo político, a favor de los procesos populares y la autodeterminación de los pueblos, llevando a dichos monopolios a la censura de estos medios, e incluso a la censura de ciudadanos que comparten dicha información.
* Especialista en Relaciones internacionales.
Analista colaboradora del CREI.
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